Hace ya más de 3 años el director Pascal Laugier sorprendía y escandalizaba a la audiencia de los festivales de cine de género de todo el mundo con su segundo largometraje "Martyrs". Algunos espectadores eran incapaces de soportar la brutalidad de sus escenas, y la cinta terminó siendo adorada y denostada a partes iguales. Ahora llega su nuevo título, que desde su anuncio llenó de expectativas y comentarios las webs de cine.
"The tall man" nos sitúa en una pequeña localidad americana rodeada de bosques y cuya principal actividad, la minería, ha terminado de funcionar sumiendo a su población en una depresión económica y también anímica. Además, las constantes desapariciones de niños en la zona han terminado por sembrar el miedo y la inquietud entre los habitantes; La leyenda de un hombre alto que roba niños en mitad de la noche se torna cada día más real. El día en que Julia presencia el secuestro de su hijo, comenzará una carrera por su rescate donde nada será como parece.
Lo primero que hay que señalar es que Laugier se aleja en esta propuesta de la violencia explícita de su anterior obra, apostando más por el suspense clásico donde la violencia o queda fuera de plano o se omite. La película comienza como un thriller de acción, cercano en forma y estilo a la película de Alexande Aja "alta tensión", pero poco a poco cambia el registro hacia el thriller sicológico, donde el escenario perderá interés en favor de los giros del guión. Así, el espectador comenzará confiado la trama pero pasados los 40 minutos iniciales se perderán en una historia que no tendrá explicación clara hasta los últimos compases del film.
Donde sí coincidirá "The tall man" con los 2 títulos anteriores de su director, la mencionada "Martyrs" y "el internado", es en la aparición de elementos conspiro paranoicos a mitad de la historia que trastocan las bases del guión y dan un repentino cambio al hilo argumental. En este caso, el giro es tan forzado y moralmente cuestionable, que, personalmente, da al traste todo lo elaborado hasta ese momento.
A parte de una excelente factura técnica, la película cuenta con una bellísima Jessica Biel, que realiza una interpretación notable incluso en los momentos más inverosímiles de su personaje, algo de agradecer ya que aparece en la mayoría de los planos de la cinta.
"The tall man" es a mi juicio una cinta fallida, engañosa y tramposa en su contenido y forma, en la que su presentación impecable y el esfuerzo de su actriz, no logran compensar un guión pensado exclusivamente para sorprender, y en donde su planteamiento moral (¿Hasta qué punto prima el bienestar de un niño sobre la voluntad de sus padres?) se diluye en un mar de explicaciones finales, rápidas y difusas, con un pretendido aire transcendental que huele a cuerno quemado y que cuesta mucho tragar.